REVIEW #CINE: ‘Desmadre incluido’, poco presupuesto y poca gracia

Desmadre incluido, el nuevo largometraje de Miguel Martí que se estrena en cines el 22 de septiembre reúne, el día de encierro por el confinamiento del COVID, a una serie personajes muy heterodoxos, que coinciden en un hotel de Béjar por diferentes motivos.

Se trata de una comedia coral de acción cuya idea original surgió a partir de la lectura de un artículo periodístico donde se hablaba de la dedicatoria de la primera edición de Don Quijote al duque de Béjar. Agregando un poco de imaginación, el director pensó en hacer una comedia de enredos y comercial, capitaneada por un elenco reconocible en el cine español.

Un historiador de lo más arrogante, Alonso de Guzmán y Zúñiga (Manuel Tallafé) llega al pueblo de Béjar en plenas fiestas. Con las calles cortadas bajo control de la Policía Local, el hombre trata de llegar a su alojamiento en su misión de hacer in situ unas investigaciones heráldicas.

A su llegada al Hotel Colón, coincide allí con Guadalupe (Macarena Gómez) ayudante de la directora del hotel que aspira a subir su puesto; Una novia (Cristina Brondo) a punto de casarse con un reprimido (Salva Reina) que no es capaz de cohabitar con su pareja pese a los empujones a distancia de su madre (Antonia San Juan); Yoaiza (Arlette Torres) siendo una exuberante cubana camarera de pisos que altera los sentidos del joven gamer Adrián (Jorge Clemente); un anciano separado del grupo con el que viaja (Saturnino García); una estudiante china de intercambio Xiao (Yibing Cao); y unos policías municipales muy peculiares (Nacho Guerreros y Javivi).

Para pasar un buen rato está bien, si bien es cierto que la comicidad va decayendo a lo largo del film. Parece una montaña rusa donde vemos secuencias muy bien hiladas y otras que descarrilan por si solas. Todos los personajes buscan el “tesoro escondido” en el hotel donde quedan confinados, y por ello suceden situaciones surrealistas entre enamorados apasionados, supuestos fantasmas, un fallecido, e incluso conversaciones misteriosas, entre las cuales destaca un buen monólogo con todos los títulos de Pedro Almodóvar.

¿Por qué verla?

Pese a ciertos despistes en el montaje y a una clara interpretación desigual e irregular de los actores, Desmadre incluido sirve como entretenimiento familiar. Es una película rodada con poco presupuesto y con la voluntad de divertir, y ambas cosas hay que tenerlas en cuenta.

 Valoración: ★

Texto: Gemma Ribera

© COMOexplicARTE

Aquí el tráiler

Deja un comentario