REVIEW #TEATRO: ‘Malditos tacones’ invita a reflexionar sobre las caras de la verdad

En el Teatre Goya de Barcelona, una plataforma giratoria sostiene a dos mujeres que parecen girar también en sus propias contradicciones. Ese movimiento constante en la obra titulada Malditos tacones funciona como símbolo del tiempo, de la vida que da vueltas sin detenerse, y de la fragilidad sobre la que se construye el poder.

Ignacio Amestoy firma un texto que enfrenta a Victoria Burton (Luisa Martín) y María García (Olivia Molina), dos mujeres situadas en la cima de sus carreras —una heredera de un linaje empresarial, la otra abogada que ha hecho prosperar un bufete propio— que, sin embargo, no escapan a los fantasmas que las persiguen.

La dramaturgia abre múltiples caminos: la ambición, la herencia familiar, las tensiones materno-filiales, la verdad como arma, y también la violencia de género, que irrumpe como una grieta inevitable en el discurso. A veces la metáfora sobrevuela tanto que el espectador se siente más cerca de lo alegórico que de lo real, lo cual puede dificultar la conexión emocional.

La dirección de Magüi Mira, marcada por un ritmo enérgico, no se priva de ofrecer respiros. Los silencios, acompañados de música, funcionan como aire que entra y permite digerir la intensidad de lo dicho. Esos momentos de pausa, lejos de interrumpir, dan espesor a la trama y subrayan lo simbólico de la propuesta.

En este terreno se sostienen dos interpretaciones notables: Luisa Martín aporta contención, gestualidad precisa y una voz modulada con acierto; Olivia Molina se mueve con mayor visceralidad, desplegando registros cambiantes que van de la fuerza a la vulnerabilidad. Juntas sostienen un duelo que oscila entre lo íntimo y lo universal, entre lo concreto y lo metafórico, con una energía que es, sin duda, el gran atractivo de la obra.

¿Por qué verla?

Malditos tacones no pretende dar respuestas, sino abrir preguntas incómodas sobre el poder, el éxito, la verdad y las violencias —visibles e invisibles— que atraviesan a las mujeres que parecen tenerlo todo. Una pieza que, con sus luces y sombras, se vive como una experiencia de vértigo.

Valoración: ★★★★

Información y entradas

Texto: Gemma Ribera

© COMOexplicARTE

Deja un comentario