TEATRO – BARCELONA – PRESENTACIÓN
El London Bar, un local histórico de la calle Nou de la Rambla de Barcelona, ha sido el escenario elegido por el Circo Histórico Raluy para presentar su nuevo espectáculo, ‘Terra’. Este emblemático bar, que desde hace más de un siglo ha estado vinculado a la actividad artística y circense, refuerza ahora su conexión con la familia Raluy: la compañía pasa a ser propietaria del local, con la intención de recuperar su protagonismo cultural. El evento de presentación coincidió con el encendido de luces del Port Vell el pasado viernes 28, espacio donde la carpa del Raluy se instalará a partir del 5 de diciembre, manteniendo la tradición de plantar su circo en Navidad en Barcelona desde hace 28 años.
‘Terra’ es, según William Giribaldi, codirector del Raluy, un espectáculo que pone el foco en la relación humana con la naturaleza y en la belleza de los elementos. La propuesta marca una nueva etapa para el icónico circo, con un repertorio renovado que combina técnica y poética: teles aéreas, acrobacias, equilibrios y números de baile que dialogan con la música y la luz de manera muy cuidada. “Nuestro circo es un museo viviente”, afirma Giribaldi. “Cada caravana, cada objeto y cada detalle respira historia”. Esta dimensión patrimonial convive con una puesta en escena actual que busca emocionar y conectar con el espectador, más allá de simplemente impactar.
El vínculo del Raluy con el London Bar se remonta a 1930, cuando Luis Raluy, padre de Carlos y abuelo de Rosa Raluy, consiguió su primer trabajo en el circo desde este local. El London Bar, abierto en 1909 por Josep Roca, había pertenecido a miembros de la familia hasta que la última propietaria cedió el local a Carlos Raluy en 2016. Ahora, la familia gestiona el bar con la intención de volver a programar circo en directo y preservar el alma cultural de este histórico espacio.
“Queremos ampliar el local y recuperar una gran sala que hay detrás. El London Bar será mucho más que un bar de copas: queremos que vuelva a ser un referente cultural”, explican desde la compañía. Incluso se ha renovado el trapecio que cuelga sobre la barra, utilizado durante la presentación de ‘Terra’. Los medios presentes disfrutamos de un avance del número de equilibrismo de Omar Marton en la entrada del bar, el cual nos dejó con ganas de más.
Rosa Raluy, directora artística, ha supervisado las coreografías y ha confeccionado a mano el vestuario, cuidando cada detalle. Por ejemplo, el cabezal que llevan las artistas que se transforman en árbol incluye más de 300 hojas cosidas a mano con cuatro tipos de tela diferentes. Además, ha creado el atrezzo y unas nuevas escenas visuales que aportan un tono más sensorial y atmosférico, manteniendo la esencia clásica del Raluy pero con un lenguaje contemporáneo y emocional.
En el escenario, el público podrá disfrutar de números que desafían la gravedad, momentos que evocan la conexión con la tierra y las raíces, y una combinación de humor, música en vivo y movimiento corporal que hacen de ‘Terra’ un poema visual y sonoro. Con una duración de dos horas (incluyendo descanso de 15 minutos), el espectáculo está pensado para todas las edades, con acceso libre durante la función para adaptar la experiencia al ritmo de cada espectador.
Tras su estreno este verano en Platja d’Aro (Girona) y una gira que comenzó en Palafrugell, ‘Terra’ llega ahora a Barcelona para instalarse en el Moll de la Fusta del Port Vell del 5 de diciembre al 1 de marzo.
Gemma Ribera
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