MÚSICA – BARCELONA – CRÓNICA
Hace unos meses que el dúo gaditano Andy y Lucas anunció públicamente su retirada de los escenarios por problemas de salud de uno de los integrantes. Para despedirse de su público más fiel -familiar y multigeneracional-, están inmersos en su gira ‘Nuestros últimos acordes’, que inició en la ciudad que los vio nacer, y que este fin de semana hizo doble parada con sold out en el emblemático Sant Jordi Club de Barcelona.
El concierto arrancó con Quiéreme y Hasta los huesos. A los pocos minutos, Lucas, tomando la batuta, dio la bienvenida a los asistentes a una auténtica fiesta. El concierto fue mucho más que un simple espectáculo musical; fue una experiencia única, emocionante y cargada de complicidad, tanto entre los artistas como con sus seguidores. “Nuestro público es cojonudo. Queremos interactuar mucho con vosotros para que esto sea cercano e inolvidable para todos”, decía el más animado de los dos.
Empezaron fuerte con Y sin ti, El ritmo de María y Por ella. Lucas se vino arriba y propuso grabar el estribillo de Quiero ser tu sueño para guardar en el recuerdo una estampa del público cantando, bailando y siguiendo sus movimientos. En el escenario los acompañan 9 músicos, encabezados por José Losada a la dirección musical y a las guitarras. Detrás, entre bambalinas, son un gran grupo de staff técnico, los cuales fueron presentando uno a uno para agradecer su labor. No todos los artistas dedican tiempo a todos los que hacen posible un show o una gira, desde la banda hasta merchandising, pasando por luces, sonido, backliners o managers.
Al rato, cuando ya habían soltado la primera dosis de pirotecnia, jugado con las luces, abierto una sesión de karaoke y lucido sus mejores galas, Andy se atrevió a hablar desde el centro de la pasarela: “Llevo muchos años en esto, pero a día de hoy aun me cuesta hablar en público, qué le vamos a hacer. Quiero agradeceros el cariño que recibimos desde que anunciamos la despedida. Ojalá algún día la salud de Lucas nos respete y podamos volver a cantar juntos, donde y cuando sea. Seguid disfrutando de nosotros como lo estamos haciendo con vosotros”, dijo antes de cantar Abuelo y liberar todas las emociones contenidas hasta ese momento.
Es evidente el contraste entre Andy y Lucas. Mientras Lucas contagió de alegría al público con su humor y energía desbordante, Andy mostró su lado más introvertido y melancólico. Claro que, como ellos mismos confesaban entre risas, son “una mezcla entre AC/DC y Los Caños”, por su dualidad y porque tienen canciones bailables y pegadizas que se entremezclan con baladas que han conquistado el corazón de mucha gente.
“Hace 20 años éramos niños, y con esta canción ayudamos a muchas mujeres a salir de esta lasca llamada violencia de género. […] Hemos viajado mucho por todo el mundo, hemos aprendido que en la vida se pueden tener muchas cosas materiales, pero una mujer es la felicidad y el amor, sea cómo y de donde sea. Las mujeres son la cosa más bonita que Dios nos ha puesto al lado”, sentenciaba Lucas con un largo aplauso por respuesta. Sus ideas son claras: Amor, respeto y diversión.
Pasarán, Y en tu ventana, Echándote de menos, Celos, Carita morena, Una chica normal, Dime que me quieres, Lola, Mírame a la cara…. ¡Una larga trayectoria de más de 20 años hace que sea necesario recopilar temazos como estos! Por algo Andy y Lucas son y serán historia del pop español.
Uno de los temas que han editado hace poco es Nuestros últimos acordes, dedicado a los seguidores. “Teníamos dos días en Barcelona y creemos que nos faltó tiempo. Posiblemente a finales de diciembre habrá otra fecha en Barcelona”, confirmaron. Es que saben que si han llegado tan alto ha sido por su fiel audiencia, de la misma forma que si conservan su humildad es porque nunca olvidarán sus orígenes.
Ellos mismos se lo montan todo, e incluso pidieron gritos de “otra, otra” o “Andy y Lucas, oé” para salir a refrescarse y volver para el clásico bis final. A su regreso, regalaron un medley en acústico con sus músicos en medio del escenario, en un ambiente más relajado. En este formato sonaron Quiero que sepas, El último beso y Cómo quieres. Justodespués, retomaron la fiesta con Camarera, De que me vale y Me estoy volviendo loco, ésta última con coreografía incluida.
Eso sí, Son de amores y Tanto la quería tampoco faltaron. En los 2000 se hacía buena música, de la de verdad, sin autotune y con voces que da gusto escuchar en directo hasta hoy en día. ¡Que viva el romanticismo y que vivan Andy y Lucas!
Texto: Gemma Ribera
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