REVIEW: «La llegada (Arrival)», ciencia ficción diferente, convincente

lallegada

CINE – INTERNACIONAL – CRÍTICA

Denis Villeneuve (Enemy, Sicario…) va a ser el director encargado de capitanear Blade Runner 2049, la secuela del clásico de Ridley Scott. Antes que eso, sin embargo, ha tenido una misión igual o más arriesgada, especial y espacial a la vez. Se trata de dirigir La llegada (Arrival), una película de ciencia ficción que ha arrasado en el Festival de Toronto, en San Sebastian e incluso en Sitges, siendo ahí la proyección sorpresa. Ha impresionado tanto a la crítica como al público por su forma de expresión completamente distinta a las cintas comunes del género. El perspicaz guion de Eric Heisserer narra cómo es el contacto que se establece entre la humanidad y unas misteriosas naves extraterrestres que aterrizan en el planeta Tierra, dando una vuelta muy interesante al concepto de la típica «visita de seres extraños que se convierten automáticamente en enemigos».

Podríamos asemejar el relato con un puzzle de 3.000 piezas. Ambas son actividades lúdicas que a primera vista plantean un enigma difícil de resolver, pero conforme vas entrando en el proceso y atando los cabos sueltos comprendes que la práctica no es tan compleja. Además, las dos propuestas ofrecen una recompensa moral muy gratificante.

Amy Adams, actriz que en su día ganó numerosos premios -incluido el Óscar- por su imponente papel en La gran estafa americana, interpreta en La llegada (Arrival) a Louise Banks, la protagonista absoluta de la película. En realidad la propuesta cinematográfica surge de una arriesgada adaptación de la novela La historia de tu vida, escrita por de Ted Chiang.  Louise Banks es una lingüista que quiere dar una oportunidad a los recién llegados de raza alienígena, y por ello decide contactar con ellos para ver sus intenciones y qué es lo que pretenden hacer con los seres humanos. Junto a ella trabaja el físico Ian Donelly (Jeremy Renner), aunque ambos deben obedecer al coronel Weber (Forest Whitaker) y a Halpern (Michael Stuhlbarg). un especialista de la CIA.

En el nuevo proyecto artístico del director, el thriller queda aparcado. El lienzo sobre el cual se dibuja la estructura del film está decorado con unas gotitas de drama y contiene un croquis dónde, si imaginásemos el esquema con forma de muñeco, la cabeza sería el lenguaje y el cuerpo la comunicación. El hecho de no poder mantener una conversación amena con los extraterrestres por falta de comprensión del idioma provoca un conflicto que llena de tensión y desconfianza a los habitantes terrestres. La historia aborda a los personajes a través de la mirada que el personaje principal tiene hacia su interior y también el de los demás.

Jugar con la introspección es algo muy característico de Tarkovski, pero aquí Villeneuve hace un uso más que acertado de este conocimiento. Y lo decimos porque, por mucho que los logogramas que dan vida a los extraterrestres estén bien logrados, lo más importante a nivel visual no es la espectacularidad de las imágenes ni la tenue luz de una fotografía singular. Los primeros planos que profundizan en la actitud de los personajes hacen que el film sea muy atractivo y, del mismo modo, los componentes sociológicos y geopolíticos invitados a entrar en escena son también elementos cautivadores, dado que consiguen emocionar al público y a la larga le permiten reflexionar acerca de lo sucedido a raíz del impactante giro del tercer acto.

La película se desarrolla a un ritmo lento pero para nada molesto, es lento en el sentido de calmado, pero no te lleva al aburrimiento. No existen escenas explosivas que contengan acciones violentas innecesarias ni exagerados montajes, sino que es una producción intimista donde la información está repartida en fragmentos. Con tal de ir descubriendo las sugerentes respuestas a las dudas generadas, el espectador va conociendo datos y detalles a la par que la protagonista. Puede que recurrir al flashback se considere una pérdida de originalidad, pero este metraje no cae en ningún momento de las casi dos horas de duración en la trampa de desviar la trama con su retrospectiva. Al contrario, emplea ésta técnica narrativa para promover una experiencia nueva desde fuera de la pantalla, incluso en el ámbito sensorial.

  • ¿Por qué verla?

Desde este fin de semana La llegada (Arrival) ya está disponible en los cines españoles gracias a la distribución de Sony Pictures España. El largometraje marca un camino repleto de curvas, caídas y remontadas, pero es digno de ver. Como toda película, tiene sus defectos, pero dado que nos ha hecho despertar y querer un poquito más a la ciencia ficción -un género demasiado extraordinario que si sigue el mismo curso siempre cansa fácilmente-, preferimos quedarnos con lo positivo. Jóhann Jóhannsson es quien pone la música para liberar la ansiedad que se siente inicialmente al participar en este viaje emocional, un recorrido por un inaudito universo de donde, sin duda, cada espectador sale con un aprendizaje cultural, lingüístico e incluso personal.

Valoración: ✮✮✮✮

Texto: Gemma Ribera
© COMOexplicARTE

Aquí el trailer:

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s